EL DALAI LAMA.-

La expectacion ante su inminente llegada era enorme. La gente que estabamos congregados en el templo de Tsuglag Khang, mostrabamos nuestra impaciencia minutos antes de que llegara hasta nosostros. Ayudado por sus consejeros, caminaba a buen paso y reverenciaba a todos los que encontraba en su camino hasta el interior de la capilla consagrada a Avalokitesvara (Diosa de la compasion). Nuestras miradas se cruzaron fugazmente, el sonreia todo el rato. A todo el mundo. Mi corazon se acelero a mil por hora. Tenia delante al Dalai Lama, el hombre que propaga el amor y la compasion, la no violencia y el bien comun. Premio Nobel de la Paz. Un mito viviente, un ser extraordinario que escribe muchas de las paginas que son y seran historia. Mi viaje tenia la intencion de acabar aqui, en el refugio de los tibetanos, pero nunca pense que tuviera la inmensa suerte de coincidir con unas jornadas impartidas nada menos que por el mismisimo Dalai Lama. No lo hacia desde hace mucho tiempo, anios, pero la insistencia de la comunidad budista de Korea, hizo que aparcara su agenda repletisima de responsabilidades, para realizar estos cursos de iniciacion al budismo, durante estos tres ultimos dias. Un regalo, pensaba para mi, despues de tantos dias de esfuerzo sobre mi burra. Si lo hubiera planeado, no lo habria conseguido, pero ya ves, cuando uno no planea las cosas, salen de primera. Tan a gusto me encontraba en este enclave del himalaya Indio, que pospuse mi viaje a Delhi hasta esta noche.

Hombre robusto, con expresion afable y siempre sonriente, demuestra su sentido del humor muy a menudo, soltando una enorme carcajada que te transmite en seguida. Su mensaje, es el mensaje de un ser humano de paz y concordia. Mensaje claro y conciso, sin rodeos. No importa que un ser humano crea o practique una religion o no, lo que importa es ser buena persona, tolerar, respetar, ayudar, tener compasion, alcanzar la iluminacion, en el caso del budismo, con el unico fin de realizar el bien a los demas. Hay que respetar todas y cada una de las religiones. Todas se parecen mucho en la raiz, aunque la ignorancia, el odio, el rencor y demas pensamientos negativos, hacen que se malinterprete el mensaje original de toda religion. El budismo es mas una filosofia que una religion en si, ya que el fin es alcanzar el nirvana o el estado de iluminacion, a traves de la meditacion, es decir a partir de uno mismo y no dependiendo de ningun Dios. Es pues, el ser humano el que tiene el poder de la mente y con ella puede alcanzar estados de bienestar increibles para, con ello, realizar el bien hacia los demas. Los cientificos han definido al budismo como la ciencia de la mente y esto al Dalai Lama le parece muy acertado. Es el control mental, enfocar nuestra mente en realizar el bien y desechar toda influencia negativa, toda contaminacion, que nos hace ser egoistas e intolerantes con los demas.

Estoy rodeado de tibetanos, tambien hay extranjeros, venidos de todo el mundo. Gente experta en budismo, estudiosos, monjes y monjas, veo sus rostros entregados a la oracion y escuchando atentamente a su Dalai. La emocion se palpa en el ambiente, te contagia, te envuelve y te eleva hacia sensaciones inesperadas. Rituales de iniciacion. Nos dan una cinta roja para los ojos, una flor de loto y un cordon rojo de proteccion. Es la iniciacion a la meditacion. Es un proceso muy complejo, con muchisimos conceptos y ligado a una dedicacion completa durante muchos anios. El Dalai es paciente en su exposicion. Su rostro es pura serenidad. Es un hombre muy culto y cosmopolita. Conoce muy bien el ritmo del mundo actual. Sus continuos viajes y reuniones con gente como cientificos, dirigentes, artistas, juventudes y demas, hacen de el una persona sabedora de lo que acontece en cualquier rincon de nuestro planeta. El mismisimo Richard Gere ha estado tambien en estas clases. Al parecer lleva practicando el budismo unos cuantos anios y su aportacion economica al Tibet y al budismo es muy generosa, segun han comentado por aqui estos dias. Sin ir mas lejos la carretera que lleva hasta aqui la dono el hace unos anios. Tras cada sesion, cuando el Dalai se retiraba y pasaba por mi lado, tan cerca que lo podia tocar, le seguia un sequito de Lamas y con ellos iba Richard Gere. A veces el pobre Richard se ponia como un tomate y pedia silencio, cuando alguna Koreana le soltaba un grito en mitad del silencio sepulcral y el respeto por el Dalai. Despues todos reiamos. Cosas de las estrellas de Hollywood.

No puedo mas que decir, que la experiencia ha sido magnifica. He visto de primera mano la entrega y debocion del pueblo tibetano y del budismo en general hacia la oracion, hacia el mensaje y hacia la figura de la representacion en la tierra de la compasion. Me sentia un morador extranio al principio, sumergido en una voragine de emociones ajenas a mi pensamiento y a mi cultura. Enseguida me di cuenta de que no hay barreras para el bien, ni para el pensamiento positivo. Comprendi que todos en nuestra medida somos portadores del don para relizar acciones compasivas y sin maldad. Vi lo facil que resulta entender este mensaje, pero a su vez al pensar en el pulso del mundo actual, tambien vi la distancia que hay entre los seres humanos. La raiz de la educacion basada en la competitividad y el menosprecio del vecino, hace que nuestra mente tamize todo lo que acontece desde la base de querer mas y mejor que los demas. Asi es dificil llegar a empatizar con el otro y menos aun ayudarle.
Me alegra que existan personas con la fuerza y el espiritu del Dalai Lama, gente constante, inagotable en su mensaje de paz y no violencia. Personas que llenan nuestra vida de esperanza y fe en el ser humano.

Apuro mis ultimos momentos en este entorno maravilloso. Las calles de Mcleod Ganj, estan repletas de puestos de todo tipo, comida, colgantes, recuerdos, ropa, bebidas, gente pidiendo, coches que pasan a toda velocidad por las empinadas y estrechisimas calles, extranjeros y budistas con su tunica grana. Sonidos y silencios. De repente, poco mas alla, la vision epica de las cumbres himalaicas, nieve, rocas, rododendros, aguilas, casitas colgadas, caminos imposibles. Viento. Banderas de oracion de muchos colores. Sonidos de las montanias. India a nuestros pies. El cielo se puede tocar desde aqui.

Por supuesto, no he podido evitar la tentacion de subir de nuevo estos maravillosos y colosales puertos de Montania con la burra.

Anoche nevo en las montanias que rodean Dharamsala. Al amanecer, la estampa era impresionante. Un regalo de los Dioses. Azul y blanco. Ligera brisa de las cumbres. Aire puro.

Delhi me espera. La ciudad del caos. Dentro de dos horas cojo el bus que me llevara a la capital india, tras 12 horas de tortuosas carreteras. Que la suerte me acompanie!

Los dias han ido pasando y con ellos todo el album de imagenes y sensaciones vividas. 25 dias de soledad y vivencias brutales. Extremos. Orillas. Mundos diferentes, pero semejantes al fin y al cabo. Se trata de sobrevivir lo mas dignamente posible. Culturas, costumbres, alegrias y tristezas. El mundo y sus multiples caras. Modos de vivir, de supervivir, de sobrevivir. Formas de alcanzar la felicidad mientras la vida pasa. Nada mas.

"Fui un instante, una decima de segundo, en las vidas de toda la gente que me vio, que me sonrio, que me alento, que me saludo, que me ayudo y que me acompanio como un hilo conductor desde que sali de Kathmandu hasta que llegue a Dharamsala. Han sido, todos ellos, rostros anonimos, mi compania y mi aliento durante toda esta magnifica experiencia vital que he tenido la fortuna de vivir. Marcados quedan pues a fuego, en mi interior mas profundo. Alla donde tan solo llegan las verdades imborrables."

Un fuerte abrazo para todos. Gracias por vuestra presencia. Todos sois tambien una parte de esa compania de la que hablo.

Cancion del dia: "Una decima de segundo" de Antonio Vega.

Hablamos desde Delhi.

Un beso enorme amor!